Normalmente la llegada del buen tiempo hace visible un problema que se ha mantenido en estado latente durante las estaciones más frías, la presencia en nuestras viviendas o locales de diferentes plagas de animales e insectos que, además de desagradables y molestas, pueden tener consecuencias para nuestra salud. La empresas dedicadas al control de plagas y a la desinsectación son la única salida efectiva en estas situaciones.
La desinsectación, en concreto, hace referencia a todas las acciones que se practican en un lugar concreto para eliminar plagas de ciertos artrópodos. Generalmente se trata de espacies de insectos, pero también incluye a arácnidos y ciertos crustáceos. Es un tipo de control de plagas muy específico, porque reviste mayor dificultad ya que todos estos animales se caracterizan por su resistencia frente a cualquier agresión externa, química o física.
Los equipos de desinsectación tienen que estar en constante proceso de evolución pues las especies a las que atacan van generando respuestas que les permiten hacerse inmunes a los productos químicos con los que entran en contacto. De ahí también que sea muy importante mantener una actividad constante de control de plagas, para prevenir que estas colonias de insectos se desarrollen demasiado.
Pero, hay que insistir en que el control de plagas y la desinsectación son mucho más efectivos si se mantienen como mecanismos preventivos, además del tratamiento puntual para atacar el problema cuando está en su apogeo. Además de productos químicos (biocidas), lo conveniente es poder aplicar medidas más sencillas que tengan menor impacto en el medio ambiente y la salud.
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